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La robustez de la economía madrileña garantiza crecimientos importantes en 2019 y 2020

El consumo privado, el turismo y el aumento del empleo en la capital fomentan que Madrid siga creciendo en 2020 en un 2,3%, según el informe publicado por el BBVA, miembro el Foro de Empresas por Madrid.

El BBVA, miembro del Foro de Empresas por Madrid, ha publicado su informe sobre la ‘Situación de Madrid’, en la que analiza la actual coyuntura de la ciudad y hace una previsión de los siguientes periodos para la actividad económica. Así, el informe comenta la inestabilidad global, que hace que muchos agentes hablen de una nueva crisis y aumente la incertidumbre.

 

No es el caso de Madrid, donde según los resultados, su crecimiento no se estanca, si no que se estabiliza y pasa del 2,8% en 2019 a un 2,3% del PIB en 2020. Un descenso mucho menos brusco que en otras economías europeas o desarrolladas. “El crecimiento global ha entrado en la fase de desaceleración, pero todavía sigue siendo sólido”, señalan en el estudio, que culpa a la industria y las medidas proteccionistas de su efecto mundial. De hecho, se observa una bajada muy notable de las exportaciones desde el pasado octubre de 2018, algo que continuará en los siguientes meses al ver la relación comercial entre grandes gigantes como China y EEUU.

 

Precisamente, sobre el comportamiento de Wall Street y las políticas de Washington, el informe advierte de que para Estados Unidos, “2020 puede ser un año particularmente difícil conforme desaparezcan los estímulos fiscales”  al no apreciarse “señales de que la inversión privada gane tracción”. De esta manera, esta tensión de relaciones internacionales afectará en primer lugar a los mercados desarrollados y se traducirá en una baja de los tipos de interés, como ya ocurrió en otras crisis cíclicas. Esto, unido a la salida del Reino Unido de la Unión Europea (el ‘Brexit’) y a la política fiscal europea más férrea que en otro momento, hace que España y en concreto Madrid se encuentren en un contexto socioeconómico complicado aunque no el peor.

 

Si la revisión a la baja para el crecimiento de todas las zonas comerciales mundiales ha dado con datos negativos para EEUU (de un 2,45 de previsión para 2019 a un 2% en 2020) o en China (del 6% al 5,85), en Europa se queda en un 1,4% para 2019 y para 2020. Esto significa mayor estabilidad, aunque la desaceleración afectará a todos. En concreto Madrid, pasará de tener un crecimiento del 3,2% en 2016 al 2.3% en 2020, predice el informe del BBVA. Se trata de un descenso, pero mucho más suavizado que a nivel estatal, ya que España pasa en el mismo periodo del 3,2% al 2%. Sin duda, la economía madrileña cuenta con recursos para paliar esta desaceleración global y estos se verán a lo largo de este año presente, cuando Madrid crezca por encima de la media nacional.

 

Por encima también de la media está la aceleración del empleo, ya que en Madrid aumentó la  afiliación a la Seguridad Social en un 4,0% en 2018 (nueve décimas por encima de España).  Para el estudio, los motivos por los que se sostiene el crecimiento es la solidez del consumo el pasado años, pero no durará. “El gasto en consumo privado probablemente perderá tracción en 2019, y crecerá de un modo más acorde a sus fundamentales”, destaca el informe. Por otro lado, el turismo también está detrás de esta tendencia. Pese a que la demanda de servicios turísticos por parte de extranjeros ha descendido notablemente, en Madrid este índice se mantiene mucho más alto que la media española. El dato cuantificable negativo es que los precios hoteleros en términos reales están aún por debajo de los de 2008.

 

En la parte de recomendaciones, desde el BBVA se anima a abordar el riesgo desde sus tres localizaciones -globales (como los aranceles), europeas (como el ‘Brexit’) y propias (como la inestabilidad política). Pero también anima a los agentes madrileños y españoles a aportar soluciones que devuelvan el esplendor al turismo para atraer clientes extranjeros, extender el éxito del comercio digital a otros sectores y no solo en las ciudades principales, así como el reto de cumplir los límites de gasto marcados por Europa con una nueva política fiscal.

 

 

Puedes consultarse el informe completo aquí.

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